Blogia
revista contra el pensamiento único

VERDURAS

VERDURAS

Es habitual describir la actividad política en este país como el patio político, designando así a lo que incumbe a nuestra clase política. Me hace gracia y creo que no es la expresión más correcta (a título personal).

Personalmente, el vocablo patio, me trae recuerdos entrañables de mi infancia, del colegio,  corriendo con otros compañeros de pupitre detrás de un viejo balón para darle un patada hacia ningún sitio.

Los patios de comunidades de vecinos, sinceramente, los encuentro muy tranquilos en la actualidad. Pocas veces veo, hoy en día, a la vecina del tercero hablando con la del cuarto de la pared opuesta sobre los amoríos de la del primero, o de cómo ha subido el precio del azúcar.

Es por ello, que encuentro vocablo más aceptable para referirnos a la política española el de verdulería. Quiero remarcar que no es mi intención ofender al gremio que nos abastece de alimentos pero si quiero que el concepto despectivo de reunión de verduleras se aplique a los politicuchos que mantenemos con nuestro salario.

¿Qué panorama político nos estamos encontrando ahora mismo?: los miembros de la oposición con un puñal en los dientes esperando a que la presa falle y destronarle; el gobierno subiendo el sueldo a altos cargos a expensas de las declaraciones de crisis del tesorero, aprobando TRAS-VA-SES con sinónimos ridículos a comunidades asociadas (vemos que si no rindes pleitesía te puedes morir de sed); los nazi-onalistas son más nazis que nunca (aprovechando la debilidad de zETAp), clínicas con minifaldas impuestas por un gobierno tolerante y democrático; una ministra de igualdad que proviene de un club de sevillanas; permisividad en pago a secuestradores sin represalia alguna; el país en retroceso; la vicepresidenta invitiendo en inmuebles...

bueno, todo digno de una verdulería y de verduleras. ¿no?

Dementia

 

 

 

 

 

0 comentarios